Esta semana de desafío finalmente se ha transformado en 10 días de desafío, ya que recibí la visita inesperada de un amigo que no veía (o mejor dicho sentía) desde hace años: un dolor de espalda y barriga tan puñetero que me ha ‘ibuprofenizado’. Muchas de las chicas que me leen me entenderán. Los chicos no, cabrones suertudos.
La verdad es que, dolores a parte, me esperaba que el desafío se me hiciera más fácil: al fin y al cabo los puntos a cumplir no eran nada del otro mundo…
EL PROBLEMA PRINCIPAL
Nooo, no voy a poner una excusa, malpensado! El problema principal que me encontré fue la cantidad de puntos y de objetivos a cumplir: no eran difíciles pero eran muchos. En el próximo desafío me centraré en 5 puntos como mucho, mejor poco y bien que mucho y mal *a ver si lo aprendo de una vez*.
Voy a escribir un pequeño resumen de cada punto y su resultado.
1) MEDITACIÓN
Estuvo bien, durante estos 10 días no me cabreé ni una vez y las veces en que estuve a punto de explotar cerré los ojos, respiré hondo y mágicamente me relajé. Lo más raro de todo es que el día en que conseguí meditar mejor… fue el primero! Me di cuenta de que da un poco igual la postura (hombre tampoco voy a meditar cabeza abajo), y que importa mucho más el lugar donde estoy (lo mejor es al aire libre, en un sitio sin ruidos o con sonidos cíclicos, como las olas por ejemplo, sí sí sí, la playa resultó ser el mejor lugar). La meditación es uno de los puntos que seguiré practicando, sin duda.
Lo que aprendí: sí que sirve la meditación, sí. Yo siempre fui escéptica pero no puedo negar que desde que medito (aunque sea unos cuantos minutos al día) estoy más relajada y no me apetece discutir (bueno, sí me apetece a veces pero me aguanto). Si como yo eres meditadora novata no te pierdas este vídeo que descubrí gracias a Aniko.
2) BEBER SOLO AGUA Y TE
Lo conseguí! Es algo que para ti resulta tan chorra que me daba hasta vergüenza incluirlo en el listado pero ya conté lo mucho que adoro a la coca cola. Eso sí, para celebrar el fin del desafío… me tomé una coca cola (a veces hay que celebrar los logros que alcanzamos no? Ok no cuela… bueno pero una coca cola a la semana no hace –tanto- daño, la disfruté como nunca y ni siquiera pude acabar la lata *y eso que era lata+pajita, la mejor combinación del mundo para tomarla*). En fin, para mi este ha sido reto conseguido total!
Lo que aprendí: que la coca cola sea mala… no es nada nuevo. Pero aprendí que puedo sobrevivir a la tentación liquida burbujeante, que el te y los zumos saben muy bien y que el agua es la mejor amiga de nuestro cuerpo (el problema es que mi alma sigue queriendo a la coca-cola pero estamos trabajando en ello…).
3) COMER + VERDURAS
Done! Ahora pienso en una berenjena y me dan ganas de hacerme el harakiri, pero bien. Calabacines, calabaza, guisantes (eso vale como verdura, vale?), espinacas y ya está creo -_- Este punto quiero que siga teniendo mucha importancia en mi vida cotidiana… incluso he decidido tener por lo menos 2 días semanales en los que solo podré comer vegetariano (vegano no porque no puedo quiero renunciar a huevos y quesos).
Lo que aprendí: que las berenjenas no me gustan tanto como pensaba y que la única manera de comerlas es en forma de albóndiga, que la calabaza me encanta y que hago un risotto di zucca a prueba de masterchef! También aprendí que no echo demasiado de menos la carne: me sigue encantando eh? pero ahora sé que soy más pastera que carnívora. Mi ADN italiano no miente.
4) HACER EJERCICIO CADA DÍA
Este punto no pude cumplirlo y es que juro que con la espalda dándome el coñazo no pude. Los primeros 4 días del desafío cumplí mi tabla de ejercicios pero tuve que darme por vencida. No puedo meter la mano en el fuego y decir que habría cumplido con lo propuesto pero en una ola de optimismo diría que sí.
Lo que aprendí: que para hacer ejercicio tengo que tener una rutina escrita, como los niños chicos. Necesito una chuleta (de hoja, no de carne) con escrito: haz x de esto, x de esto otro y x de aquello. Sin chuleta estoy perdida y acabaré en el infierno de Dante (búscame en el quinto piso, circulo de los perezoso, socia honoraria 12.344.125).
5) ESCRIBIR UN POST AL DÍA
Escribí cada día, tanto post (que no haya publicado no quiere decir que no haya escrito eh majos!) como offline. Igualmente no estoy contenta: no han sido días de creatividad sin parar, que va… uno de los motivos principales para empezar este desafío era intentar desbloquearme y soltar algo más que típicos post o escritos pero será que en este periodo estoy un poco espesa (a veces me pasa), que tenga tantas cosas en la cabeza que no sepa por donde empezar a ordenarlas (siempre me pasa) o simplemente que el próximo viaje (nos vamos en 5 días sabes?) me haya ocupado hasta la última neurona… o peor aún que no valgo para escribir y punto, aún así yo no tiro la toalla.
Lo que aprendí: que me cuesta abrirme hasta a mi misma, cuando se trata de hablar de temas serios huyo y huir de mi misma es un flaco favor. Tengo que trabajar mucho en esto.
6) KEEP CALM!
Ya hice un pequeño spoiler arriba: conseguí mantener la calma, no cabrearme por chorradas ni amargarme. Y así se vive mejor, sin duda. A ver si interiorizo de una vez la frase ‘prefiero ser feliz que tener razón’, si es que soy más cabezota a veces…
Lo que aprendí: la lección más grande me la dio el vídeo de arriba… ‘prefiero ser feliz que tener razón’.
7) 10’ MARATÓN ESCRITURA
En lugar de crear unas dinámicas creativas aproveché el maratón de 10’ para escribir un resumen de mi día de desafío. Aquí dejo algún trocito (prefiero quedarme la mayoría de cosas para mi solita, que esto tampoco es gran hermano, copón)
“El día II del reto ya me puso en dificultad y es que ir a hacer la compra resultó ser como para aquellos marineros que tienen que escaparse de los cantos de las sirenas. Solo que en mi caso la ‘sirena’ eran latas y de botellas de coca cola que me miraban con cara sensual (seducida por latas de coca-cola lo que me faltaba para experimentar, mmm con esas curvas, con este vestidito rojo pasión, tan dulces y burbujeantes. Pero resistí. Olé yo!)“
“Estoy escuchando una canción de Levante que ahora mismo dice ‘que vida de mierda’ pero es bien linda eh?, es graciosa se llama ‘Alfonso’. Este tío resulta que cumple años y ella está en esta fiesta donde no conoce a casi nadie, se aburre como una ostra y se quiere morir. Los buenos pensamientos siguen eh?. Que los demás estén amargados ya no me amarga.”
“A veces pienso en que mi vida es como una gran aventura: me fui de casa, me fui de Italia, me fui a Barcelona, me fui a Asia, volví a Barcelona con la intención de irme de nuevo, me fui a India, luego a Nueva Zelanda, Malasia, Japón, volví –volvimos- sabiendo que nos iríamos de nuevo, nos fuimos a los Balcanes, un viaje raro. Raro. Y ahora nos iremos de nuevo, para volver y para volver a irnos. Me encanta esta sensación de ‘que sea lo que tenga que ser’, no me preocupa la estabilidad, ni el futuro, pero por otro lado no puedo dejar de envidiar a los que no necesitan ‘buscar por el mundo’ su felicidad, los que la tienen dentro de casa, mirando a los ojos de unos hijos que puede que yo no tenga nunca (o sí?). Estoy feliz, pero la mía –la nuestra- es una felicidad que a primera vista parece superficial, en realidad es irónica y un poco cabrona y es que para ser felices tenemos que ser infelices: para viajar tenemos que dejar a nuestras familias, cosa que duele y si no lo hacemos no viajamos, no somos completos. Un lio. Suerte que casa queda siempre a un vuelo de distancia.”
Lo que aprendí: que el maratón de escritura es un instrumento interesante pero quizás me equivoqué en utilizarlo como ‘diario de abordo del desafío’ y no dejar fluir la imaginación. Volveré a tomar los maratones tras el viaje.
8) PINTAR CADA DÍA
Lo hice, pero la mayoría de días no lo hice al estilo tradicional, lo hice con photoshop: descubrí que me relaja mucho. Me gusta. Los resultados son regulares pero oye, lo importante es que disfruté en el camino…
Lo que aprendí: que me encanta pintar con photoshop, es la pintura para vagos pero relaja y entre trabajo y trabajo me viene de perlas. Los resultados no son para tirar cohetes pero tampoco el tema era ser la Picasso del nuevo milenio.
9) 1HB&B (BEACH&BOOK)
No lo hice cada día: era el punto que más fácil me parecía y que sin embargo ya al segundo día de desafío me pareció una tontería tener que cumplir… no era un reto, era algo guay que viene bien hacer de vez en cuando: en el momento en que se volvió obligatorio se me pasaron las ganas de cumplirlo. Una pequeña auto-revolución.
Lo que aprendí: que lo que resulta muy fácil al final no lo resulta tanto. Seguramente si me hubiese encontrado bien habría cumplido este punto pero no lo habría disfrutado a tope… cuando algo que me gusta se disfraza de obligación no lo veo como desafío y pierdo interés. Es curioso como hoy, que ya he acabado el desafio, tengo ganas de ir a la playa/piscina a leer.
10) ACABAR EL DESAFÍO
¿Lo acabé? Quizás tu creas que no, pero yo creo que sí. Vale, puede que no cumplí con cada auto-trato (entonces no lo acabé, dirás) pero fueron días de muchos pensamiento, de trabajo interior, de reconocer problemas y proponer soluciones. El jueves nos vamos de viaje y hasta navidades no regresaremos a España, cosa que me hará más complicado seguir con la segunda parte del desafio… más complicado pero no imposible!
Lo que aprendí: que los desafíos son una manera de sacarnos de nuestra zona de confort sin salir, físicamente, de ella, que tengo que trabajar más en mi, quitarme los miedos de desnudarme ante mis ojos, y que desafiarme me vino bien… voy a seguir haciéndolo
3 comentarios en “MINI DESAFÍO DE UNA QUEJICA CON BUENA VOLUNTAD: RESULTADOS I”
Me voy a releer este artículo. 😉
¡Ayyyyyyyyyyyy! ¡Pero qué emoción! Leí el post ayer a la noche y estuve pensando en regalarte algo…
Entonces aquí va: charán charán (?) algunas formitas de comer más frutas y más verduras
1) Por la mañana tomar un jugo de 1 zanahoria + 1 manzana + 1 kiwi. Se puede sustituir el kiwi por frutillas, ananá o lo que sea que haya ahora en España (¿naranjas?). Vienen unas licuadoras pequeñitas que metés todo ahí, un poquito de agua y plim, un jugazo. Tomarlo en ayunas mejora el buen humor 🙂
2) Cortar zanahoria en tiritas + apio y comerlo entre comidas, cuando una está ansiosa por cosas para nada importantes. A mí me embola máximamente rallar zanahoria y encontré que es divertido comerla en tiritas (¿corte juliana sería?) como un snack
3) Al juguito de la mañana, si tiene mucha fruta, se le puede agregar también banana y espinaca. Como la zanahoria y la espinaca (apio también) no tienen unos gustaaazos para jugo, siempre está bueno mezclarlas con frutas dulces o ácidas (banana, naranja, manzana).
Me ha encantado leerte, te sigo por aquí. Y otra cosa… creo que necesitaré tus dotes diseñodireles (jajajaja) así que prometo escribirte prontito.
Con amor de surfista australiana que hoy agarró su primer ola,
Maga.-
Bueno de que tardé casi 2 meses en contestarte mejor no hablamos, no? En fiiiin, si ya me conoces 🙂 Además me viene genial el comentario porqué hoy comencé dieta y milagro… no estoy deprimida -de momento, de momento-.
Te imagino, tras todos estos días, surcando las olas mejor que Kelly Slater *gracias google por averiguarlo en menos de 1 segundo*
Ya leí la crónica del viaje a Bali, espero tu barriga haya hecho buena reserva de satay y platanito frito.
Desde el otro lado del mundo se te quiere :-*